¿Cuánto cuesta un crédito? es una de las preguntas que más frecuentemente recibimos. Antes de empezar, tendríamos que definir ¿Qué es el crédito? El crédito es una herramienta financiera que acelera la tendencia de un negocio: el crecimiento o la bancarrota.
Ahora bien, entrando en materia, la respuesta correcta a ¿Cuanto cuesta un crédito? Es: Depende. Nos explicamos: El costo real de un crédito depende para que se use la liquidez que se obtiene del crédito, es decir para qué vas a usar el dinero. Si la liquidez se invierte de manera productiva, el retorno que se obtiene de la inversión debe ser suficiente para pagar el monto del crédito.
Ganancia > Costo del crédito = 🙂
Ganancia < Costo del crédito = 🙁
Para poder calcular los costos de un crédito, típicamente las instituciones financieras utilizan los siguientes términos. En ocasiones hay más pero estos son los más utilizados:
- Comisión por apertura: Depende de la dificultad de hacer el análisis y contrato del crédito. Entre más información se comparta, más sencillo y más económico es el proceso de análisis. La comisión por apertura tiende a ser más económica para una empresa grande que publica información auditada o que ya es cliente frecuente de la institución financiera en cuestión. Por el contrario, para una PyME es más cara ya que tiene poca información pública y auditada. Típicamente en México oscilan entre 0% y 5% del valor del crédito.
- Tasa de interés: La tasa de interés no es más que un valor que las instituciones financieras le asignan al riesgo de la capacidad de pago y de la capacidad de recuperación a través de una garantía. A mayor riesgo mayor será el interés (y viceversa). El riesgo de capacidad de pago baja conforme una empresa crea un historial de éxito operativo: crecimiento en ventas, rentabilidad, historial de cumplimiento de pagos en créditos (buró y círculo de crédito). El riesgo de la capacidad de pago también depende para qué va a usar el crédito: Comprar máquinas para subir producción de productos que existe demanda vs. Gastar en lujos que no generan ventas. En México las tasas de interés para empresas inician alrededor de los 8% hasta 60% anual (incluso más, dependiendo el caso).
Por lo general, las empresas más jóvenes y más pequeñas son más riesgosas que los grandes corporativos, y como resultado pagan comisiones y tasas de interés en crédito más altas.
Es importante señalar, que como dueño de una empresa siempre debes de tener como meta que el costo económico real de un crédito deba ser cero: Ya que se debe de usar el dinero del crédito para invertir en actividades rentables que generan flujo de dinero suficiente para pagar el crédito, los intereses, las comisiones, y por supuesto: La utilidad de la empresa.
Por el contrario, el costo económico real de un crédito puede ser devastador si la empresa usa el dinero del crédito para invertir en actividades que no generan flujo de efectivo suficiente para pagar el crédito, como por ejemplo: mudarse a un edificio más lujoso, pagar viajes, comidas, gastos personales, etc. Un mal crédito puede costarle a la empresa perder su negocio o la garantía.
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